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La fotografía participativa encuentra sus orígenes en la fotografía comunitaria que nació en Estados Unidos y en Inglaterra en la década de 1960. Se constituye como una metodología participativa, pues la comunidad toma un papel central y clave en la definición e implementación de las acciones relacionadas con su desarrollo. En este contexto, entregar una cámara fotográfica a las comunidades sujeto de interés es una manera de construir vínculos con ellas y ayudarlas a crear sus propias imágenes sobre las realidades que viven y compartir sus propias perspectivas, con el fin de lograr cambios sociales.

Diversas organizaciones de muchos países han tomado conciencia del poder del acto fotográfico y han desarrollado iniciativas de fotografía participativa, las cuales proponen enseñar, por lo general a grupos de personas desfavorecidas, el uso de la cámara, con el propósito de ayudarlas a caracterizar su realidad, concientizarse acerca de ésta y darla a conocer. En el caso de los niños y niñas, la fotografía es una herramienta que permite promover su imaginación, descubrir su propia creatividad y desarrollar habilidades artísticas, así como generar autoconfianza, autoestima y esperanza. La mayoría de las iniciativas desarrolladas con niños y niñas no toman en  cuenta a la primera infancia, es por ello que nuestro proyecto se constituye como una experiencia única e innovadora.

 

FOTOGRAFÍA PARTICIPATIVA Y PRIMERA INFANCIA

El proyecto “Desde los ojos de los niños y las niñas” pretende contribuir al cumplimiento del derecho a la palabra, a tener voz, a ser escuchados y tomados en cuenta, tal como aparece en el artículo 12 de la Convención sobre los Derechos del Niño.

 

El proyecto constó de 3 fases:



  • En la primera fase, se brindaron las herramientas necesarias para que los niños y niñas usaran correctamente una cámara digital.

  • La segunda fase tuvo el objetivo de propiciar la participación y expresión de los niños y las niñas a través del uso de la cámara, para darles la posibilidad de compartir, de manera creativa, lo que les llamara la atención en los ambientes de aprendizaje del Centro Educativo y en sus alrededores.

  • La sensibilización de la comunidad, mediante la exposición de las fotografías en varios lugares estratégicos de Medellín, se constituyó como la tercera fase de la iniciativa.

En la primera fase, nos enfocamos en la formación en habilidades fotográficas de los niños y niñas mediante 6 talleres con los 150 niños y niñas del Centro Educativo, con la colaboración de una fotógrafa voluntaria y del equipo de docentes y auxiliares. Los talleres buscaron acercar los niños y niñas a las cámaras digitales, a su funcionamiento, a la noción de distancia, a las variaciones de luz y a la relación entre fotos y cámaras.


Debido a que no había cámaras digitales para todos los niños y niñas, en la segunda fase, formamos equipos de 5 a 7 niños y niñas según los grupos ya establecidos en el Centro Educativo: Primera Infancia (2 años), Infancia (3 años) y Pre-jardín (4 años). En total, 19 niños participaron en esta parte del proceso. Luego de realizar las actividades con los niños y niñas para identificar sus gustos, les entregamos las cámaras y observamos con placer y sorpresa las imágenes que aparecieron detrás de los lentes de las cámaras.

 

ORÍGEN DE LA FOTOGRAFÍA PARTICIPATIVA

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